El altiplano granadino fue la tierra de los primeros pobladores de Europa como lo demuestran los yacimientos de Orce, Castillejar, Galera, Cúllar y Huéscar.
En Huéscar encontramos un emplazamiento de pinturas rupestres denominado “Piedra del Letrero”.
Torre del Homenaje de la Alcazaba
La ciudad fue fundada por los árabes, estando totalmente amurallada, al hacer frontera con los Reinos de Granada y Castilla. Hoy sólo queda la Puerta del Sol y la Torre del Homenaje de la Alcazaba, en la Plaza de la Alhóndiga.
En la sillería de la Torre del Homenaje se emplearon lápidas de las necrópolis romanas.
Hasta 1488 no se incorpora a la Corona de Castilla quedando como gobernador Rodrigo Manrique, concediendo los Reyes Catolicos las Capitulaciones por la que se respetaban las costumbres y religión de los musulmanes y con la condición de que la villa no se entregaría a señor alguno, siendo por lo tanto villa real.
Pero en 1495 los Reyes Católicos vulneraron el pacto y entregaron Huéscar al Condestable de Navarra y posteriormente en 1513, Juana la Loca donó la villa al Duque de Alba, Don Fadrique de Toledo.
Colegiata de Santa María de Huéscar
A finales del S. XVIII Francia intentó un bloqueo a Gran Bretaña y la ayuda española se concretó en la “División del Norte” al mando del Teniente General Pedro Caro y Sureda, Marqués de la Romana. En 1808 Dinamarca declaró la guerra a Suecia y estaba prevista la invasión con tropas francesas y la “División del Norte”, pero las tropas españolas fueron aisladas por Dinamarca y Francia.
Ante dicha situación el 11 de noviembre de 1809 el Ayuntamiento de Huéscar declara la guerra a Dinamarca.
La paz se firmó en 1981, 172 años después, hermanándose Huéscar con la ciudad danesa de Kolding. Este año se conmemora los 200 años de la declaración de guerra con el lema “Bicentenario de la Paz”.
La iglesia de Santiago (S. XV) se construyó sobre la mezquita árabe de la que conserva la torre.
Iglesia de Santiago
En el centro de la población se alza la majestuosa Colegiata de Santa María del S. XVI, de estilo gótico-renacentista, de amplias dimensiones, siendo Monumento Nacional. Su maestro mayor fue Alonso de Covarrubias. Se inició con el maestro toledano Enrique Egas y Jacobo Florentín.
La Plaza Mayor es el centro neurálgico de Huéscar y está presidida por el Ayuntamiento de la ciudad.
Plaza Mayor
El Convento de las Dominicas se construyó en 1612 por la generosidad de Doña María de Chinchilla, siendo un convento de clausura.
Convento de las Dominicas
Otros monumentos religiosos de la villa son la Ermita del Ángel y la Iglesia de la Soledad (S. XVI), actualmente en restauración.
Las posibilidades de senderismo son múltiples a través de rutas como la del Paraje de las Santas, la de las Sequoias de la Losa o el Pico de La Sagra.
Para descansar y pernoctar son típicas las Casas Cueva como las cercanas a los Baños de Fuencaliente.
Casa Cueva de Fuencaliente
La gastronomía de Huéscar se basa en los productos de la tierra y entre ellos destaca la “lata al horno de cordero segureño”, el relleno de Huéscar, el lomo de orza o el “Remojón de San Antón”. Todo ello acompañado del vino de la tierra denominado “Vino Picoso”.