Rioja Alta:
En esta zona de la Rioja, no hay que dejar de visitar una bodega de
vino, y pasear por Santo Domingo de la Calzada y San Millán de la
Cogolla.
Rioja Baja:
Aquí podemos realizar un paseo largo por Calahorra, ver su magnífica
catedral y parada obligatoria para degustar una menestra de su huerta.
Ir de pinchos por esta zona no tiene desperdicio.
Ezcaray:
A los que gusten de los deportes de invierno pueden disfrutar su pequeña
pero recoleta estación invernal de Valdezcaray. Además podemos visitar
su pueblo que tiene unos paisajes maravillosos y unos hayedos que
estallan en rojo en otoño.
Valles del Alhama y
Cidacos:
Hace sólo un par de años se ha abierto un parque temático de icnitas,
huellas fosilizadas de animales prehistóricos, que se a convertido en
una atracción cada día más popular dentro y fuera de la península.
Logroño:
En la capital podemos ir a una de las calles más visitadas de la ciudad.
Esta es la calle Laurel, en ella podrás degustar multitud de pinchos
típicos y de concurso, que realmente esta maravillosos. También puedes
degustar uno de los famosos vinos de esta tierra.
Laguardia:
Un pueblo en el que no se puede entrar con el coche, ya que está
construido sobre antiguas bodegas. En ella podrás encontrar multitud de
bodegas de la antigüedad, que ya no están activas y como se realizaban
el vino artesanalmente. Esta ciudad es también ideal para ir de pinchos
y a su vez degustar vinos de las bodegas muy famosas que hay en esta
ciudad, todo ello con precios muy económicos. |