Un recorrido por el sur de España,
sin duda lleno de folklore, ritmo y una gastronomía única.
Comenzamos por Sevilla, capital de Andalucía.
La ciudad se mueve al ritmo de la música y el fervor religioso,
y se jacta de poseer un clima envidiado por la mayor parte de
España.
Si nos adentramos al centro de
Sevilla podemos visitar La Casa del Maestro,
en el conocido barrio de Santa Catalina. Allí nació, en
1904, Manuel Serrapí Sánchez o 'Niño Ricardo, el Maestro'.
La casa natal del guitarrista flamenco, se ha convertido en
un hotel característico de la zona.
Para comer a un precio muy asequible o coger
fuerzas para continuar el recorrido, nada mejor que ir al
Bar Alianza (Plaza de la Alianza, tel.
954217635), junto a la Giralda, y después
aprovechar para visitarla.
Uno de los iconos de la ciudad es La
Giralda (Patrimonio de la Humanidad desde 1987)
parte de la antigua mezquita del siglo XV y hoy parte de la
Catedral de Santa María. Durante siglos fue
la torre más alta de España, y a día de hoy, es la más alta
de Andalucía. En su parte más alta se halla una bola llamada
tinaja, sobre la que se alza un Giraldillo,
estatua que hace las veces de veleta. Esta catedral, es de
las más visitadas de España, y merece la pena conocerla
porque todo lo que se habla de ella es poco comparado con lo
que realmente se vive allí.
Un lugar recomendado para cenar es el
Restaurante Abades Triana (Calle Betis, 69; tel.
954 28 64 59), en pleno barrio de Triana, donde podremos
contemplar unas vistas envidiables del Guadalquivir al mismo
tiempo que probamos la rica gastronomía andaluza.
Triana, uno de los barrios más populares de la
ciudad, posee una identidad muy marcada, y nos permite
conocer más a fondo la cultura y tradiciones de Sevilla.
Cogemos la autovía en dirección Cádiz
hasta llegar al centro de la ciudad, una de las más antiguas
de Europa occidental.
Allí podremos visitar el Museo
Provincial de Cádiz o la Catedral,
que tardó 126 años en construirse. Esta Catedral es visible
casi desde cualquier punto de la ciudad, por lo que
encontrarla no será muy complicado.
Muy cerca de allí se encuentra el
Bar Mesón el Riojano. Es el lugar ideal para
degustar la cocina típica andaluza. Para descubrir una de
las mejores vistas de Cádiz, recomendamos Véjer de
la Frontera. Su mirador ofrece unas vistas únicas
de la ciudad.
Zahara de los Atunes,
uno de los pueblos más bonitos de Cádiz, es otro
imprescindible en nuestro viaje. Se trata de un pueblo de
raíces marineras que aún conserva sus playas vírgenes de
arena fina y agua cristalina. Sin duda, el encanto de sus
calles y el hecho de que el hormigón aún no haya llegado a
su paseo marítimo, hacen que pasear por él sea un verdadero
placer.
Las vistas que unen este lugar con
Tarifa, siguiente punto de nuestro recorrido,
tampoco tienen nada que envidiar de otros muchos paisajes.
Esta ciudad está situada entre aguas del Mar
Mediterráneo y del Océano Atlántico, actuando de línea
divisoria. Por tanto, está situada en la parte más angosta
del Estrecho de Gibraltar, y a tan solo 14
kilómetros de las costas marroquíes.
Una vez en Tarifa, podremos alojarnos en
el Hotel Misiana, y almorzar en el
Bar Gunlao.
Nuestra ruta por el sur de España termina en
Los Caños de la Meca en Barbate.
Esta localidad, situada al sur de Cádiz tiene
unas excelentes playas de arena muy fina y cuenta con el
Parque Natural del Acantilado y Pinar de Barbate,
donde crecen pinos piñoneros, una variedad protegida, y
también viven aves rapaces, lo que convierte a este parque
natural en uno de los más importantes de Andalucía.
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