La mayor parte de los edificios bilbaínos
con solera se articulan en torno a su laberíntico Casco
Viejo.
En su corazón se encuentra la Catedral de Santiago,
que data de finales del XIV y principios del XV.
Construida en estilo gótico, aunque con
detalles del gótico florido, es punto de paso de la
peregrinación jacobea.
Por extraño que suene, el casco histórico
se conoce como la Parte Vieja en San Sebastián. Sin embargo,
los jóvenes donostiarras son los que animan las callejuelas
en los numerosos bares y restaurantes de la zona.
Y para paseos románticos, merece la pena
transitar por la Alameda del Boulevard, una céntrica calle
que separa la vieja Donostia de la nueva. Esta zona está
sembrada d edificios neoplaterescos, como el Teatro Victoria
Eugenia y el Hotel María Cristina, a orillas del Urumea.