San
Sebastián (País
Vasco)
Donostia-San Sebastián, bajo el lema "paz y
convivencia", ha convencido al jurado con su oferta de espacio en el que
poder explorar cómo la cultura y la educación pueden contribuir a la
construcción de una Europa diversa, plural y en paz. La candidatura de
la ciudad vasca confíaba en su potencial como urbe con un gran bagaje de
tradición cultural, capacidad de organización, colectivos culturales,
festivales internacionales, gente creativa y una ciudadanía con buenas
prácticas culturales. Ahora Donostia se convierte en una ciudad modelo
de referencia en Europa por sus proyectos sobre la cultura de paz.
¿Quién era el jurado?
Un grupo formado por trece expertos culturales, de
los cuales seis son nombrados por el estado miembro en cuestión, en
este caso por el Ministerio de Cultura y, los otros siete por las
instituciones europeas, han sido los encargados de decidir la ciudad
ganadora. El presidente del jurado de la Capitalidad Cultural
Europea 2016 es Manfred Gaulhofer.
¿Qué se valora?
Los criterios para tomar esta decisión han sido
acordados por la Eurocámara y el Consejo de la Unión Europea y, aunque
el programa cultural varía de unas ciudades a otras, debía tener una
dimensión europea, potenciar la participación de los ciudadanos, tener
un impacto duradero y contribuir al desarrollo de la ciudad.
Burgos ha defendido el proyecto denominado
"R-Evolución", que englobaba aspectos como la ciudad como cuna del
castellano, reflexionar sobre el patrimonio de la ciudad o explorar los
espacios públicos. El proyecto cultural de Burgos 2016 tenía el concepto
argumental del mayor hallazgo científico y social producido en la ciudad
durante los últimos años, como son los yacimientos arqueológicos de
Atapuerca.
Córdoba expuso su proyecto "Córdoba en clave 16", que
resaltaba la interculturalidad, la pluralidad y la participación que
hacen de la ciudad un icono de la cultura y del diálogo entre
civilizaciones.
El programa de Las Palmas de Gran Canaria se titulaba
"Una luz en el océano" y estaba basado en el desarrollo, la innovación,
la creatividad, la educación y la cooperación internacional. Esta
candidatura quería aglutinar voluntades y fijar el desarrollo integrado
de la ciudad en todas sus dimensiones, desde el espacio físico hasta sus
valores éticos. La idea del gobierno municipal era potenciar la
peculiaridad de que la ciudad esté dentro de una isla y cerca de varios
municipios que cuentan con una gran actividad cultural y disponen de las
infraestructuras necesarias.
Segovia ha defendido su proyecto "Sin Segovia no
Luna", cuyas señas de identidad eran la apuesta por una "pequeña gran
ciudad", el paisaje y la innovación. Quería darse a conocer como ciudad
abierta, moderna y acogedora. Para su proyecto Segovia se ha querido
basar en la ciudad francesa de Lille.
La última, Zaragoza, apostó por su programa "Europa,
Utopía/ Europe, Utopia", cuyos valores son la reflexión, la educación,
la participación ciudadana, la accesibilidad o la creatividad. Confiaba
sus posibilidad a su riqueza cultural y sus infraestructuras turísticas
y culturales, a las que se sumarían las que dejará la Exposición
Internacional del 2008. Los responsables políticos de este proyecto
creían que se pondría a Zaragoza en el circuito europeo de grandes
conciertos, exposiciones y manifestaciones culturales y, además habría
creado una conciencia, un modelo, una forma de entender y desarrollar la
cultura. La capitalidad cultural hubiera aportado en el 2016 doce meses
en materia cultural de diversa índole que hubiera atraído a la capital
aragonesa a tres millones de visitantes y hubiera consagrado a la ciudad
como referente del turismo y de la actividad cultural.
La Capitalidad se comparte
San
Sebastián compartirá el título de Capital Europea de la Cultura 2016
con la ciudad polaca de Wroclaw, al sureste de ese país. Polonia y
España han sido los dos países elegidos para albergar este
acontecimiento cultural después de que el Parlamento Europeo y el
Consejo de la Unión acordasen en 2006 una lista de ciudades que tendrán
esa distinción hasta 2019.
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