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Barbados. La cuna del
ron auténtico -
Barbados
Una tierra donde el surf, el
‘hip-hop’ y su licor son una filosofía de vida.
Los habitantes de
esta isla antillana tienen la alegría en vena, siempre bien aderezada
por su música y los combinados a base del elixir nacido en sus
destilerías.
Sensación de vivir
Dos caras de una misma moneda y ambas muy favorables.
Esta isla de clima tropical es un destino idóneo para los que buscan
relajarse y disfrutar de sus aguas color turquesa llenas de arrecifes de
coral tanto como para los aficionados a actividades más enérgicas, como
el surf, que encuentran en la cara noroeste las aguas idóneas para
practicarlas.
Estos son algunos de los muchos privilegios que nos
ofrece esta isla, que espera la caída del sol para cambiar de tercio y
pasar a la acción. Reggae, hip-hop, soul y rhythm and blues hacen mover
casi como poseídos a los ciudadanos de Barbados y a sus visitantes.
Este
efecto se acrecienta cuando la música de la cantante Rihanna, nacida y
criada en la isla, suena en los pubs, discotecas y plazas, donde te
recomendamos ir sin complejos para que disfrutes de un ambiente
sensacional. El ritmo y la melodía son parte del alma de los bajan, como
les gusta ser llamados a sus habitantes.
De influencias británicas, los bajan reconocen estar
muy orgullosos de su isla, que forma parte de los países de la
Commonwealth, por lo que el inglés es el idioma oficial, aunque muchos
jóvenes han optado por estudiar el español como idioma secundario. Así
que de una forma u otra no tendrás problemas para hacerte entender.
Las temperaturas medias durante el año en este destino
oscilan entre los 21ºC y 31ºC, lo que favorece a los bajan a presumir de
un carácter afable, alegre y sonriente.
Barbados, el tercer país más desarrollado de América
después de Estados Unidos y Canadá, se divide en 11 distritos o
parroquias (la capital, Bridgetown, está en la de Saint Michael). El
índice de progreso se basa en el grado de educación de sus habitantes,
su salud y el nivel de vida. Y los ciudadanos de Barbados tienen estos
tres factores muy a su favor.
Bridgetown
La mejor manera de explorar la ciudad es a pie, lo cual solo te llevará
un par de horas. Comienza tu visita en la calle principal, Broad Street,
que también es el lugar ideal para ir de compras. En Cave Sheperd, por
ejemplo, encontrarás desde recuerdos a joyería, pasando por ropa de
playa y cosméticos. En el extremo oeste de esta calle está la iglesia
anglicana de Saint Mary's y en el opuesto, el edificio del Parlamento de
Barbados.
Después de visitar la plaza National Heroes y los
bonitos Fountain Gardens, una buena opción es ver la isla desde los
aires (Horizon
Helicopter. Desde 150 euros).
Playas de ensueño
En la costa oeste están las playas más tranquilas, con
aguas cristalinas y arrecifes de coral. Si quieres practicar deportes
acuáticos además de relajarte y disfrutar de la brisa que acompaña a los
días siempre soleados, este es tu sitio. Aquí podrás practicar snorkel y
diving, o surfear con una moto de agua.
Para que no te pierdas ni un rincón de la isla te
recomendamos que alquiles un coche. Los precios de un utilitario rondan
los 250 euros por semana. En el aeropuerto o en la capital, Bridgetown,
puedes alquilar uno.
De esta forma podrás recorrer Barbados de punta a
punta con tranquilidad. La distancia más larga de oeste a este son 15 km
y de norte a sur, unos 40 km.
Una vez tengas el transporte solucionado, puedes
empezar por recorrer la costa oeste, de sur a norte. Sal de Bridgetown
en dirección a las playas de Carlisle Bay, Brandons Beach y Paynes Bay
Beach.
No sabríamos decirte cuál de ellas es la mejor, todas
son idílicas y paradisíacas, por lo que te aseguramos que desearás que
el tiempo se detenga.
Pero lo mejor es que todo está muy cerca, así que no tardarás más de 15
minutos en ir de una playa a otra y visitar muchas más.
Si quieres darte un baño con tortugas, caballitos de
mar y bancos de peces de mil colores y recorrer las calas una a una,
tienes la opción de coger un catamarán, que sale del
puerto deportivo de Bridgetown, por 60 euros con comida incluida.
Los amantes del surf tendrán que cruzar la isla: 40
minutos en coche que puedes aprovechar para conocer el interior, antes
de llegar a la zona atlántica. Te recomendamos la playa de Bathsheba, es
única. A lo largo de todo el arenal, encontrarás enormes rocas en la
orilla de más de 8 m de altura, esculpidas por el agua; formaciones
rocosas separadas por el fuerte oleaje de antiguos arrecifes de coral.
Cuando el viento sopla, los surfistas cabalgan por los
túneles rizados que forman las olas, que una vez en la orilla se
deshacen y dejan una cortina blanca hasta la tostada arena.
Si te sientes con fuerzas, puedes subir a lo alto de
la colina y contemplar todo el litoral. Una magnífica oportunidad de
presenciar un océano Atlántico inmenso, escenario de batallas de piratas
y corsarios.
Escapada a Oistins
Una de las escapadas que puedes planear es al pueblo pesquero de Oistins,
en la parroquia de Christ Church. El mejor día para ir es el viernes, ya
que por la tarde está la lonja y el mercado de pescado fresco que han
traído los pescadores después de una larga jornada pesquera.
Una vez hayas visitado la lonja, tienes la
posibilidad, muy recomendable, de cenar al aire libre en uno de los
muchos chiringuitos o restaurantes que hay junto al mar. Si quieres
probar un buen pescado, opta por el pargo rojo o por el pez volador, que
junto a unas patatas asadas es uno de los platos típicos (lo podrás
degustar por unos 8 euros). Aunque si prefieres langosta caribeña, no lo
dudes, también está riquísima.
Después de cenar, puedes dar un paseo a lo largo del
puerto marítimo, donde podrás comprar recuerdos y artesanía. Y para
finalizar la noche, Oistins es el centro de reunión de jóvenes y no tan
jóvenes que cada viernes se citan en su plaza mayor. Si te quedas hasta
el final, apreciarás lo importante que es la música para los bajan:
soul, rhythm and blues, hip hop, pop...
La artesanía es el ron
Dirígete ahora hacia el norte de la isla tomando la
carretera que se adentra en su interior. Enseguida verás cómo el terreno
va haciéndose más salvaje y cómo te rodean grandes palmerales y unos
árboles selváticos llenos de lianas (aquí los llaman bearded figs o
barbudos, de ahí el nombre de la isla)... Una experiencia natural muy
gratificante.
La carretera conduce hasta la destilería St Nicholas
Abbey, una de las más modernas –si bien conserva el método tradicional
de prensa– que además es una preciosa mansión-museo del siglo XVIII.
La caña de azúcar, principal materia prima de
Barbados, se recolecta entre febrero y julio. Posteriormente se trocea y
se machaca para extraerle el jugo, que será cocido. Se obtiene así un
jarabe que hay que filtrar, para separar los cristales de azúcar que se
forman. El resultado es un líquido oscuro y espeso llamado melaza.
La melaza se disuelve con agua y se le añade levadura
cultivada para iniciar el proceso de fermentación. La temperatura y el
tiempo intervendrán y serán responsables de los diferentes sabores
finales del licor. Una vez terminada la fermentación, el siguiente paso
es la destilación, en la que se elimina toda el agua. Se vuelve a
calentar en grandes recipientes para obtener el producto final, que será
envejecido en barriles de roble, para dar una mayor calidad y para
obtener el matiz que el maestro ronero pretende.
La elaboración del auténtico ron caribeño está siendo
cada vez más personalizada por los maestros roneros, pero previamente al
toque personal de estos expertos hay un trabajo duro desde su inicio.
La destilería más antigua
En Barbados hay cuatro destilerías que se pueden visitar. St Nicholas
Abbey, que mantiene un método tradicional de producción de ron; Mount
Gay, que es la más antigua del mundo –hay que decir que la primera
producción de ron documentada está fechada en esta instalación en 1703–;
Cockspur Fine Barbados Rum, y Foursquare Destillery, que dispone de un
gran complejo de producción de ron frente a unas enormes extensiones
dedicadas a la plantación de caña de azúcar.
En las cuatro destilerías puedes solicitar un tour por
las instalaciones y una introducción a la elaboración del ron, aunque si
puedes elegir, nosotros te recomendamos alguna de las dos primeras: St
Nicholas Abbey o Mount Gay.
Barbados. Nuestra guía
CÓMO LLEGAR
La compañía aérea
British Airways vuela directo desde Londres a Barbados. El vuelo
dura unas 8 horas y el billete sale aproximadamente por 800 euros. Una
vez en el aeropuerto de Bridgetown, lo mejor es alquilar un coche para
recorrer la isla a tu aire (unos 250 euros/semana).
Si lo prefieres,
puedes coger un taxi hasta el hotel: el trayecto te costará unos 15
euros.
DÓNDE DORMIR
Hotel
Hilton Barbados, a 2 km de Bridgetown. Un gran establecimiento con
una bonita playa a sus pies. Habitaciones grandes con vistas al mar
Caribe y a las piscinas privadas. Desde 160 euros la noche, con desayuno
tipo bufé.
St James Luxury Apartment-hotel, al norte de Bridgetown, a 15
minutos en coche. Estos apartamentos son de lo mejor, la playa es
espectacular y además está en la zona donde llegan los catamaranes con
turistas que se acercan a nadar con las tortugas. Los precios de las
habitaciones van desde 130 euros la noche.
CENAR Y TOMAR UNAS COPAS
Te recomendamos que hagas una reserva en el restaurante
Lonestar, uno de los mejores de la isla. Está situado a pie de
playa, podrás cenar tranquilamente mientras escuchas el suave oleaje del
mar Caribe.Este local ofrece una cocina de influencias mixtas, caribeñas
y mediterráneas, ya que el chef es Italiano. Para cenar, pide cou-cou,
el plato típico de Barbados.
Puedes acompañarlo con corned beef. Comer a la carta
te saldrá por unos 50 euros por persona. Si decides ir de copas,
saliendo de Bridgetown y por la Highway 7, llegamos en pocos minutos en
coche (5 km) a la zona de St. Lawrence Gap. Aquí encontrarás, además de
restaurantes, numerosos bares de copas, pubs y discotecas donde pasar un
rato animado.
DATOS PRÁCTICOS
Para entrar: Pasaporte en vigor con una validez mínima
de 6 meses.
Moneda: Dólar de Barbados - 1BBD = 0,35 euros.
Diferencia horaria: 6 h menos que en España.
INFORMACIÓN
www.visitbarbados.org y
https://barbados.org/index.html
(ambas tienen la opción de ofrecer la
información también en español).
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